El cuerpo de una monja no muestra deterioro a pesar de estar enterrado desde 2019

Miles de personas acudieron en masa a un pequeño pueblo de Missouri para ver el cuerpo de una monja que no se ha descompuesto a pesar de haber estado enterrado durante cuatro años.

Católicos de todo el país viajaron a Gower, Missouri, para presenciar la preservación aparentemente milagrosa del cuerpo de una monja, la hermana Wilhelmina Lancaster, incluso después de cuatro años de ser sepultada.

"Es realmente increíble", exclamó Parfait Miaktsindila.

Solo Dios puede hacer algo así. No tengo duda.

Este sorprendente descubrimiento se desarrolló cuando personas en el convento intentaron reubicar los restos de la hermana Wilhelmina. Para su sorpresa, al abrir su ataúd, descubrieron que su cuerpo había permanecido notablemente intacto.

"Es una señal que incita a la gente a cuestionar, a reflexionar, pero no brinda certeza absoluta. Requiere un acto de fe", explicó Joseph John Mullen, quien se embarcó en un agotador viaje de 16 horas desde Pensilvania para testificar personalmente esta vista increíble.

Gower, una pequeña ciudad que cuenta con poco más de 1500 habitantes, está situada a una hora en coche al norte de la ciudad principal más cercana. El viaje al convento no es tarea fácil, sin embargo, personas devotas de todos los rincones de la nación estaban decididas a no perder esta oportunidad de presenciar lo que muchos consideran un auténtico milagro.

"No podía dejar pasar esto; es una experiencia única en la vida, ¿sabes?" Miaktsindila enfatizó.

Encontrar milagros como este refuerza nuestra fe, por lo que animo de todo corazón a otros a presenciarlo con sus propios ojos y participar en lo que hemos presenciado hoy.

Vale la pena señalar que la propia Lancaster estableció el mismo convento en Gower. Según un miembro de la hermandad, su ataúd se había agrietado, lo que permitía que la humedad se filtrara al interior. Sin embargo, su cuerpo se ha mantenido en un estado de conservación excepcional.

"Para ser completamente honesto, estaba abrumado", confesó Mullen. "Abrumado, te lo digo. Claro, te encuentras con historias y relatos de tales sucesos, tal vez en algún lugar de Europa, pero presenciarlo de primera mano en nuestro mundo contemporáneo es un profundo testimonio del poder perdurable de la fe católica".

Quienes realizaron el viaje a Gower son unánimes en su creencia de que la experiencia les ha abierto los ojos a nuevas posibilidades.

"Pido a otros que vengan y sean testigos de esta maravilla con sus propios ojos porque a veces albergamos dudas", instó Miaktsindila con seriedad. "Cuando lo presencias por ti mismo, te obliga a contemplar la esencia de la vida".

El cuerpo de la Hermana Wilhelmina Lancaster estuvo en exhibición hasta el pasado lunes (29 de mayo).